Estos mismos están compuestos en gran parte de elementos de aluminio muy ligeros y fáciles de manejar en obra. La ligereza disminuye la fatiga de los operarios y aumenta la seguridad en obra, lo que se traduce en un aumento de la producción. El transporte, montaje y desencofrado son fáciles. La ocupación de las grúas disminuye, dejándolas disponibles para poder realizar otros trabajos. La gran variedad de elementos para el apuntalamiento de cargas - empezando por los puntales de acero hasta el sistema TITAN-Megashore de aluminio – con sus correspondientes homologaciones, permite soluciones económicas, prácticas y versátiles.

La misma capacidad de adaptación queda patente en la gestión de cargas horizontales. Se pueden utilizar los tornapuntas adecuados eligiendo entre una amplia gama en la que utilizamos como materia prima tanto el acero como el aluminio con sus ventajas correspondientes.

Ischebeck posee una gran variedad de dimensiones y de modelos de vigas, incluso hasta en los sistemas más sencillos de encofrado de forjados. El empleo exclusivo de aluminio y plástico es la base para su economía y longevidad. Al final de las obras, en el momento de devolver el material al almacén, se notarán menos gastos por pérdidas o roturas y una reducción de los desagradables desacuerdos.

Nuestros sistemas para encofrados verticales, de muros y tabiques, a base de paneles modulares o mediante encofrados a medida utilizando vigas horizontales ensambladas, cumplen con las más altas exigencias de calidad de la superficie del hormigón acabado.

Junto con dichos productos existen gran cantidad de accesorios y complementos útiles y adaptables a otros sistemas. Detrás de ellos, están las experiencias adquiridas con nuestros clientes en las numerosas obras realizadas en todo el mundo.